La
hubara canaria, conocida en Fuerteventura como avutarda,
está en peligro de extinción. De 1998 a 2003 el número
de machos ha descendido en un 35%.
Joachim Hellmich, miembro de la Unión Internacional de
la Conservación de la Naturaleza (UICN) ha realizado estudios para Agonane–Ecologistas
en Acción. Estudió los núcleos reproductores en la
Zona de Especial Protección para las Aves de Lajares
y descubrió que el 82,5% de los lugares de cortejo de
la hubara se han quedado fuera del espacio protegido, donde el hábitat
de las aves está afectado por planes urbanísticos, campos de golf,
vertederos, extracción de áridos y carreteras, y en general por
la presión humana.
Afortunadamente,
ahora hay un proyecto que intenta mejorar la dieta de la hubara. El proyecto
Agonane ha puesto en funcionamiento diversas gavias abandonadas. El
sistema agrícola tradicional de Fuerteventura usa diques laterales de
tierra o trastones para conservar el agua de escorrentía. En
total se han recuperado más de 30 gavias. Se han plantado semillas de
alfalfa majorera. La búsqueda de legumbres endémicas de la isla
ha sido otro de los objetivos del proyecto, en un ejemplo de sostenibilidad,
porque también se lucha contra la erosión y aumentan la biodiversidad
y la productividad biológica. No es necesario utilizar fertilizantes
ni productos tóxicos y por eso traerá beneficios para las aves.
Más información en http://www.iespana.es/proyectohubarafuerteventura/